Reducción de Mentón
Los mentones masculinos son típicamente cuadrados y anchos, mientras que los femeninos son más estrechos, inclinados y con menos proyección. Para lograr la armonía facial femenina completa, el cirujano evalúa la cara de la paciente determinando la forma más efectiva de lograr la feminización, aplicando la técnica más adecuada en cada caso particular.
Para acceder a los huesos de la barbilla, el cirujano hace un corte en la encía inferior, lo que evita las cicatrices visibles.
El siguiente es un ejemplo de tres casos de reducción de mentón con las características más frecuentes:
Primer caso:
Para los pacientes que tienen una gran prominencia tanto en el ancho como en la altura del mentón, será necesaria y recomendada una reconstrucción total del mentón, un procedimiento mediante el cual el cirujano extraerá parte del hueso del mentón y cortará el exceso haciéndolo más pequeño y reposicionando o moviéndolo hacia adelante o hacia atrás, cualquiera sea el caso del paciente. Los huesos del mentón serán unidos con mini placas de titanio que aseguran su solidificación y curación.
Segundo caso:
Para lograr un mentón armoniosamente femenino, algunos pacientes solo requieren que sean fresados o raspados de los bordes del hueso para afinarlo.
Tercer caso:
Hay pacientes que carecen de la proporción facial adecuada, que es causada por la falta de feminización del mentón o la falta de proyección en el tercio inferior del rostro, En este caso se coloca una pequeña prótesis, que les dará en el rostro un efecto mas femenino y armonioso.
Anestesia, Hospitalización y recuperación
Para este tipo de intervención es necesario aplicar anestesia general, siendo un día de hospitalización. Un protector de mentón lo acompañará durante unos días para evitar que los tejidos blandos se muevan y se curen adecuadamente. La higiene oral será esencial para prevenir infecciones. Durante los primeros días, será visible la hinchazón y el entumecimiento del mentón, que también tendrán poca sensibilidad durante las primeras semanas después de la cirugía. Otra molestia será causada por la hinchazón del labio inferior, lo que dificultará el habla, todas estas molestias se derivan del proceso inflamatorio, que evolucionará con el paso de los días. Una semana después podrá unirse a su trabajo habitual.
Complicaciones
– Infecciones causadas por la ingesta incorrecta de antibióticos recetados por el médico.
– Asimetrías, que son poco probables y corregibles si la intervención la realiza un médico adecuado.
– Alteraciones sensoriales en la región del mentón.
– Reacciones adversas a la anestesia.
Todos los pacientes pasan por un proceso pre quirúrgico durante el cual se someten a pruebas como:
– Análisis completo de exámenes de sangre y orina, radiológicos, cardiológicos, neumáticos, entre otros, lo que reduce la posibilidad de complicaciones durante y después de la intervención.
